Ayer comenzaron las jornadas de debate de la Ruta de la Seda en Melilla. Fue en el teatro Kursaal, y allí acudieron el grupo de expertos de la UNESCO, liderados por el responsable de la ruta, Ali Moussa, quién explicó que la ciudad autónoma ha sido escogida como sede "porque aquí hay diálogo entre religiones y culturas".
Moussa profundizó en su explicación y añadió que "Melilla es una ciudad histórica por la que pasa esta ruta y un ejemplo de cohexistencia pacífica".
El objetivo de la UNESCO con estas reuniones es desarrollar un atlas interactivo que sirva como lucha contra la intolerancia y poder avanzar así con mensajes de paz. Por ello se ha rescatado este proyecto que nació hace 30 años con la implicación de muchos países. Y Melilla, según Moussa "tiene el secreto de la convivencia pacífica de los pueblos, queremos conocer ese secreto durante estas jornadas". Y añadió que esta ciudad no es solo "una bahía donde hay inmigración".
Estos expertos del departamento de Dialogo y Memoria de la UNESCO empezaran hoy un trabajo interno, y estarán acompañados por dos melillenses: Vicente Moga Romero, y Sebastián Sánchez.
También asistió al acto la consejera de Cultura, Fadela Mohatar, quien explicó que esta es una gran oportunidad para que Melilla sirva de ejemplo para poner en valor "que aquello que une a los pueblos es mucho más importante que aquello que los separa”.
Mohatar comentó que las reuniones que se celebrarán hasta el viernes corresponden a una iniciativa global, apoyada por la Fundación Melilla Ciudad Monumental, la consejería de Cultura y el Instituto de las Culturas.
La consejera aseguró que, en la mesa de ronda celebrada ayer, "la Ciudad de Melilla puso en valor la gran singularidad y especificidad de ese ejemplo que podemos dar en estas interacciones culturales". Y justificó sus palabras añadiendo que la ciudad autonómica, "dentro de un reducido espacio tiene mucha diversidad cultural y pluralidad, ya que es un ejemplo de convivencia de forma armoniosa y natural mientras hacemos de puerta con un país muy desigual". Y finalizó diciendo que "somos frontera entre dos mundos, pero jamás ha habido un problema de convivencia, nuestro ejemplo es extrapolable a otros lugares".
Tras la mesa redonda de ayer, los expertos tuvieron una cena en la que hubo una representación de los rituales que se realizan durante las bodas gitanas, berberíscas, amazighs, cristianas e hindúes. Mohatar explicó que, para ello, "contaron con el apoyo, tanto de las diferentes comunidades para hacerlo de la manera más fidedigna, como con el de una compañía de teatro".
Hoy los expertos acudirán a la exposición de Marta Marzol, y ya el viernes acudirán a la Ruta de los Templos y por la tarde irán al museo Tecnológico y museo Sacro
La elección de Melilla como sede de estas jornadas corresponde a parte de la estrategia que hay en la Ciudad desde hace tiempo para" impulsar la visibildad y en cierto modo poder retomar el proyecto para que Melilla sea declarada por la UNESCO como Ciudad Patrimonio de la Humanidad", explicó Mohatar. Y añadió que este es un "intento más que nos permitirá armar nuestro proyecto para presentar nuestra candidatura al consejo de Patrimonio de nuestro país, que es el que luego tiene que elevar la propuesta a la propia UNESCO para ser declarada Ciudad Patrimonio de la Humanidad".
La consejera finalizó comentando que "estamos convencidos de que van a quedar admirados y llamaremos la atención de manera positva para que cuando toquemos las puertas de la UNESCO sepan rápidamente quienes somos, qué es Melilla".